Te gustan los libros viejos, esos que otros desprecian porque los ven como un desperdicio inútil, o un objeto caducado. Sabes apreciar el fondo y la forma, el contenido y el continente, la calidad de un texto y la belleza de una encuadernación. Tienes criterio a la hora de elegir y ordenar tus libros, o estás dispuesto a irlo adquiriendo.
Te importa poco el qué dirán. Eres capaz de hablar con los sabios del pasado y ellos no te juzgan, al revés, te comprenden y te enseñan todo lo que saben porque atiendes su mensaje y porque valoras la forma en la que decidieron hacerte llegar su mejor legado.
Intuyes, como Gregorio Marañón, que andar con libros usados no supone un riesgo para tu salud sino que, por el contrario, refuerza tus defensas físicas… lo mismo que las psíquicas.
Te ha costado elegir y encaminar tus primeras búsquedas. Tres o cuatro autores de cabecera fueron guiándote y ahora que lo tienes entiendes que disponer de un tema preferido no supone encerrarse en una cárcel sino ser dueño de una herramienta, una llave o un vehículo que trabaja todos los materiales, abre cualquier puerta o te transporta a lugares insospechados.
Eres un bibliófilo y eso quiere decir que no amas tontamente a todos los libros por igual sino que los buscas y miras con criterio. No eres de esos culturetas que adoran a los libros por ser libros. Sabes -y eso te lo enseñó también la historia de Alonso Quijano- que un amor desordenado por el libro conduce a la locura. Sabes que no todos los libros son buenos. Sabes que hay algunos que deberían ser quemados.
Te gusta la lógica del lenguaje, la armonía en la decoración, las buenas tradiciones, las cosas bien hechas y la sopa de letras. Has aprendido a concentrarte sin hacer yoga. No dependes de la electricidad tanto como tus contemporáneos. Amas el silencio y la buena conversación.
Perteneces -sin saberlo- a una comunidad de privilegiados y percibes que las librerías, más que cualquier otra institución que tenga que ver con los libros, son tu refugio y el de tus compañeros.
En Libros con Historia queremos ser tu gimnasio, tu club y tu peña. Ven a nuestras tertulias y encuentros. Participa en las que se vayan anunciando o propón otros nuevos eventos. Aquí verás que no eres un bicho raro. O sí, que lo eres, pero que no estás solo. Que hay más y que te estaban esperando.
¡FELIZ AÑO NUEVO!
¡FELIZ 2025 d.C. Y FELICES LECTURAS!